Adictos a las redes sociales

Janet González Bolívar

Lejos del alcohol, los cigarrillos y hasta las relaciones sexuales, las nuevas tentaciones en la vida diaria son tan difíciles de resistir y se acceden con solo apretar unos pocos botones.

Se trata de Facebook y Twitter, las redes sociales más populares del momento, que gracias a la multiplicación de los smartphones y las tablets han sabido pasar de una simple afición a una adicción.

Así lo determinaron los investigadores de la Escuela de Negocios Booth de la Universidad de Chicago, quienes encontraron en un reciente estudio que –en ciertos casos– los deseos de revisar los perfiles en estas plataformas pueden llegar a generar en las personas una adicción superior al apetito sexual y a la nicotina (en el caso de los fumadores).

Los resultados de este análisis,obtenidos en un sondeo en línea a 250 participantes en Alemania, ponen de manifiesto que ver las actualizaciones en Facebook o echarles un ojo a los últimos tuits son, hoy por hoy, actividades tan comunes como comer, bañarse o dormir.

Muy accesibles Al analizar los hallazgos de la investigación, la psicóloga clínica Ana Cecilia Sala señala que el hecho de que las redes sociales sean tan irresistibles se debe en buena medida a su alta disponibilidad.

Después de todo, los teléfonos inteligentes permiten estar conectadas a ellas las 24 horas del día, sin mayores trabas, comprobando así si alguien ha publicado una foto o comentado en un status.

“La tentación es más grande (que el sexo y la nicotina) porque es algo más accesible. En medio de una reunión no puedes sacar un cigarrillo y fumártelo, pero sí puedes sacar el celular donde tienes la app, ya sea de Facebook, Twitter o el que sea, y tenerlo disponible. Ahora tenemos computadoras accesibles en nuestros trabajos y tenemos los smartphones encima, de modo que las redes van con nosotros a todas partes”, recalca la especialista, catedrática del Departamento de Psiquiatría del Recinto de Ciencias Médicas.

La psicóloga explica, asimismo, que la tentación de visitar estas plataformas también obedece a la necesidad que sienten las personas de –por un lado– compartir lo que hacen, sentirse aceptados y admirados y –por el otro– saciar el incuestionable deseo de tener información de otras personas ofrecidas en primera mano.

“Lo que ha creado estas redes sociales es acrecentar la necesidad del ser humano de alimentarse de lo que está pasando en la vida de otras personas, añadiéndole así drama a la vida de ellos. Hay un deseo de crear esta novela de lo que está pasando en la vida de otros: ‘¿Se habrá casado ya?’, ‘¿El bebé que va a tener será nene o nena?’ y, por otra parte, hay unas ganas de crear una imagen propia ante el mundo de quién uno supuestamente es. Porque por más triste que tú estés, si pones una foto sonriendo, el mundo de las redes sociales va a creer que eres una persona sumamente feliz y exitosa”, advierte la Dra. Sala.
“Como yo veo las cosas, este auge de las redes va a ir in crescendo ante los nuevos avances, y es algo que tenemos que estar alerta por los peligros que supone”, reconoce la experta en conducta.

Riesgosa dependencia Los riesgos de engancharse con las plataformas sociales son reales, por lo que los expertos subrayan la necesidad de crear fuerza de voluntad para evitar una adicción.
“Una de las amenazas que se da es que te privas de la interacción social real porque estás encerrado en tu computadora o celular. A nivel de salud física, no es ningún secreto que la Internet, así como los videojuegos, se asocian con vidas más sedentarias”, puntualiza la psicóloga Sala.

Si ya las redes se han convertido en un vicio y resulta difícil dejar de revisar los perfiles constantemente, será indispensable tomar medidas serias que disminuyan el tiempo que se dedica a esas plataformas.

Detén el vicio
Ponle freno a la necesidad de entrar a tus perfiles sociales a cada rato siguiendo estos consejos.

1. Establece un itinerario:  Determina el tiempo que les dedicarás a tus perfiles y apégate a esa agenda, cosa de que tus demás actividades no se vean afectadas.
2. Cero apps:  Si piensas o sabes que no podrás resistirte a la tentación de estar revisándolas, evita a toda costa bajar las aplicaciones de las redes a tu celular.
3. Busca distraerte:  Probablemente, hayas descuidado otras áreas importantes de tu vida, así que ocupa tiempo en ejercitarte y compartir con la familia, entre otras actividades.
4. Autocontrólate:   Para no caer en las garras de las redes, establece pequeñas metas como “hoy solo entraré a Facebook por 15 minutos antes de irme a dormir”.
5. Comparte con tus amistades:   Tus amigos en la “vida real”, con los que puedes disfrutar y contar en los malos momentos, valen mucho más que los conocidos virtuales.

Fuente  Dra. Ana Cecilia Sala, psicóloga clínica